Más que una pastelería, somos una familia que crea momentos dulces para ti.
Nuestro viaje comenzó en 2016 con solo alfajores de maicena que rápidamente se convirtieron en una sensación local. Impulsados por el aliento de nuestros primeros clientes, decidimos ir por más y ampliar nuestro catálogo.
A medida que nuestro negocio floreció, mis siete hijos se convirtieron en un sistema de apoyo inquebrantable para seguir creciendo. Entre ellos, mi hija Gaby, ahora una hábil repostera que comparte nuestra pasión por crear deliciosos dulces. Todos juntos decidimos formar Warawa.
Patricia.
En Warawa, creemos que la repostería es una forma de arte y abordamos cada creación con meticuloso cuidado y atención al detalle.
Nuestro nombre, "Warawa", deriva de la palabra quechua que significa "adornado", lo que refleja nuestro compromiso de asegurarnos de que nuestros postres sean tan atractivos visualmente como deliciosos.
Cada bocado de un dulce Warawa es una explosión de sabor, un testimonio de nuestra pasión por utilizar los mejores ingredientes y técnicas de horneado tradicionales. Creemos que el amor es el ingrediente secreto que eleva nuestras creaciones de lo ordinario a lo extraordinario.
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Tenemos una amplia variedad de deliciosos postres para cualquier ocasión.